Las posibilidades en el encuadre de un trozo de realidad para inmortalizarlo en una fotografía son infinitas. ¿En dónde está el criterio para escoger qué se queda y qué se va en la imagen? Decir que en la técnica que sigue el fotógrafo sería quedarnos cortos, sobre todo cuando se trata de uno que en cada disparo es fiel no sólo a su estilo, sino también a su alma. En los clicks de Fer Juaristi se cuelan las creencias, deseos, pasiones, corazonadas y raíces de un artista que ha encontrado en la cámara la herramienta para hablarle al mundo de lo que hay que sentirnos orgullosos.

En su primer libro, "Visbons", Fer comparte algunos de sus "visual boners" acompañados de las ideas que lo han impulsado por el camino de hacer de la fotografía una forma de vida. En el viaje por las páginas cargadas de inspiración habrá varios consejos para volar más alto en el arte de capturar un momento y firmarlo con la tinta indeleble de una emoción, aunque me atrevo a decir que la última frase incluye al resto a modo de una extraordinaria conclusión: "Agradecido con lo que tienes. Temerario con lo que quieres".

Al final del recorrido, seas fotógrafo o no, te quedará el deseo de seguir esa voz que te hace único, la que te hace ver al mundo como nadie más puede verlo.